Expertos aseguran que no hay un fundamento científico para acudir y «cargarse de energía» en zonas arqueológicas durante los días cercanos a este fenómeno

Enrique Vázquez Lozano /Guadalajara

El Equinoccio de Primavera 2024 en México sucedió  el 19 de a las 21:06, según informó  Durruty Jesús de Alba Martínez, investigador del Instituto de Meteorología y Astronomía de la Universidad de Guadalajara. Cada año en México, durante estas fechas, colectivos culturales acuden a zonas arqueológicas a “cargarse de energía”, tal y como sucedió en El Ixtépete en Zapopan y en el Centro Interpretativo Guachimontones Phil Weygand en Teuchitlán, Jalisco.

Según datos del Consejo Municipal de Protección Civil y Bomberos (PCYB) durante el lunes y martes acudieron cerca de 800 personas por día a las ruinas del Ixtépete, mientras que en Los Guachimontones incluso tuvieron diversas actividades culturales como conciertos y juegos de pelota que incluso se extendieron hasta el 24 de marzo.

De Alba Martínez advirtió que cualquier día es apto para exponerse a la energía solar pero, que debe tomarse en cuenta que “alrededor de medio día y en estas épocas hay una gran cantidad de irradiación Ultra Violeta (UV) y puede ser cancerígena, no hay una fecha específica para tomar la energía del sol”.

Equinoccio, proviene de los vocablos griegos euqus igual y nox noche, y se refiere al evento astronómico en donde la noche y el día duran el mismo tiempo. A lo largo del año se da el equinoccio de primavera y el equinoccio de otoño, el primero el 20 o 21 de marzo y el segundo en el 21 o 22 de septiembre. La tierra se sitúa a la mitad respecto a su órbita alrededor del Sol, estos cambios de estación se dan tanto en el Hemisferio Norte y el Hemisferio Sur. En el hemisferio norte se da paso del invierno a la primavera, y cuando se da en el Sur es el paso del verano al otoño. En el polo norte el día pasa de ser una larga noche de seis meses a un largo día de seis meses. En el ecuador el sol pasa por el cenit exactamente a las doce del día y en el polo sur el sol pasa de un día de seis meses de duración a una noche de seis meses de duración.

Rosalba Delgadillo Torres en su artículo El equinoccio de primavera: Mitos y realidades, menciona que ste tipo de rituales no se basan en datos científicos y lo que han propiciado son daños en el patrimonio arquitectónico prehispánico, las personas se exponen a rayos Gamma, Ultravioleta, Infrarrojos, X, que sólo ocasionan en algunas personas manchas en la piel, que puede degenerar en cáncer, incluso, para exponerse de esta forma no es necesario ascender a alguna pirámide, se puede hacer a las 12:00 de la tarde en cualquier punto, además de que no existe ningún edificio prehispánico alineado intencionalmente con este  fenómeno astronómico.